Las bodas de mañana y de tarde tienen sus pros y contras. Si estás en esta tesitura de no saber cuando hacer tu boda, a continuación te desvelo las mejores partes de cada una. Ya te adelanto que ambas opciones son estupendas y muy populares, por lo que al final también es cuestión de gustos.
Bodas de día, la mejor opción cuando los días son más cortos
Aunque muchas bodas se concentran en verano, lo cierto es que se realizan bodas a lo largo de todo el año. Si por casualidad celebramos las bodas en otoño, invierno o incluso a principios de la primavera, no cabe duda de que las bodas de día son la mejor opción. Esto es debido a que durante estos meses los días son más cortos, por lo que si celebras la boda de tarde, tendrás poca luz natural.
Lo ideal es que en las bodas tengamos un poco de cada; luz natural y también la luz artificial preciosa en la noche. Pero si hacemos una boda de tarde en otoño o invierno, fácilmente veremos que a las 18:00 – 19:00 horas de la tarde ya prácticamente es de noche.
La luz natural del día también es ideal para la sesión de fotos, porque las fotografías quedarán mucho mejor. Al igual que la decoración de la boda, que resaltará mucho más al verla al principio de día y luego de noche.
Otra ventaja de optar por las bodas de día, es que la fiesta empieza antes y acaba antes. Esto es ideal para las personas que trabajan al día siguiente o que vienen desde fuera, para que no se le haga tan pesado. En definitiva, estas son las principales ventajas de elegir las bodas de día.
Bodas de tarde, las preferidas durante el verano
Las bordas de tarde son prácticamente un must have del verano. Nos encantan las bodas al aire libre y con buenas temperaturas, algo que nos ofrece el verano.
Durante el verano, los días son más largos. Aunque celebres una boda de tarde, tendrás luz hasta prácticamente las 22:30 horas de la noche, pudiendo aprovechar muchísimo el sol y disfrutar de buenas sesiones de fotografías, así como de bonitos decorados.
Así que se ponga la noche, ya se puede disfrutar de una iluminación muy romántica en los jardines, bailando a la luz de las estrellas. ¡Es el combo perfecto!
Las bodas de tarde también son las preferidas de muchos invitados y de los novios porque así hay más tiempo para prepararse. Por ejemplo, para ir a la peluquería, hacer desplazamientos o ultimar los últimos detalles de la boda.
Otra ventaja, es que este tipo de bodas también son más largas. Al empezar de tarde, se alargan hasta bien entrada la madrugada. Normalmente, suelen acabar a las 05:00 horas de la noche, por lo que es prácticamente un día entero de fiesta. Ideal para los más marchosos.
Como ves, tanto las bodas de mañana como de tarde tienen sus ventajas. ¿Y tú? ¿Con cuál de las dos te quedas?
Y esto es todo por hoy, la semana que viene vuelve con más tips, mientras, podéis seguir mi trabajo en Instagram.
Un besiño!!!